INTRODUCCIÓN
En estos 16 años que han transcurrido desde que inició el siglo XXI, el mundo se ha visto envuelto en una vorágine de avances tecnológicos en todos los rubros de la ciencia y la vida cotidiana.
Las tecnologías de la información y comunicación, conocidas por su abreviatura como TIC, son un conjunto de tecnologías requeridas para el almacenamiento, recuperación, proceso y comunicación de la información.1
Antecedentes de las TIC
La información y comunicación datan de tiempos prehistóricos; un ejemplo de ello son las pinturas rupestres, que revelan la organización de un sistema de transmisión de señales de los habitantes de esas épocas. Estas formas han evolucionado con la creación de nuevas tecnologías, que facilitaron el intercambio de la información. Sin embargo, fue hasta los años 70 cuando inició la “era digital”; los avances científicos en el campo de la electrónica causaron el impulso de las TIC, que combinaban esencialmente la electrónica con el software.
Ya en los años 90, las investigaciones desarrolladas permitieron la convergencia de la electrónica, la informática y las telecomunicaciones, lo que hizo posible la interconexión entre redes, y fue así que surgieron las TIC tal como ahora las conocemos.2
Ejemplos y características de las TIC
Existen múltiples ejemplos de TIC como el teléfono, los celulares, la imprenta, el correo y las computadoras, pero, sin duda, el que ha causado más impacto en el desarrollo de las sociedades es el internet.
El internet es más que una plataforma para el intercambio de datos: es la red mundial que permite el acceso a la información desde cualquier parte del mundo y hace posible la comunicación desde distintos lugares sin la necesidad de estar frente a frente. Todo esto sucede en un lapso casi instantáneo, lo que facilita el intercambio y la obtención de información prácticamente inmediatos.
Algunas de las características fundamentales de las TIC son:3
Inmaterialidad, su materia prima es la información en múltiples códigos y formas.
Interconexión, aunque se presentan de forma independiente, pueden combinarse y ampliar sus conexiones.
Interactividad, permite la interacción del sujeto con la máquina y, así, la adaptación de éstas a diversas áreas educativas y cognoscitivas de las personas.
Instantaneidad, facilita la rapidez de acceso e intercambio de la información.
Calidad de imagen y/o sonido, lo que da fiabilidad y fidelidad a la información transferida.
Penetración en diversos sectores de la sociedad: salud, educación, economía, etc.
Al igual que en la Educación Primaria y en la ESO, en Bachillerato se
distingue entre «asignaturas troncales», «asignaturas específicas» y
«asignaturas de libre configuración autonómica» —en esta última categoría
es donde se incluye la asignatura Lengua Cooficial y Literatura en
aquellas comunidades autónomas que la posean—. Corresponde al Gobierno
determinar los contenidos de las asignaturas troncales, mientras, las
Administraciones educativas podrán «complementar los contenidos de las
asignaturas troncales» y «establecer los contenidos de los bloques de
asignaturas específicas y de libre configuración autonómica».
Según el artículo 1.25, que añade el artículo 34 bis a la LOE, en el
primer curso se cursarán asignaturas troncales «generales» (fondo de color
marrón) y asignaturas troncales «de opción» (con fondo blanco, de las que
en cada modalidad se escogen dos), además de las asignaturas específicas
(con fondo verde). La Lengua Cooficial y Literatura no es una materia
troncal, sino una «asignatura de libre configuración autonómica».
Según el artículo 1.26, que añade el artículo 34 ter. a la LOE, en el
segundo curso se cursarán asignaturas troncales «generales» (fondo de
color marrón) y asignaturas troncales «de opción» (con fondo blanco, de
las que en cada modalidad se escogen dos). La Lengua Cooficial y
Literatura no es una materia troncal, sino una «asignatura de libre
configuración autonómica».